11 mayo 2010

Lila referido a una Flor (3 parte)

- La historia q tengo pensado contarte es bastante larga, cuanto tiempo tengo hasta q llegues a tu casa? -pregunto la tortuga.
- Pues no se, unos diez minutos
- Bueno entonces vamos un rato al parque q tienes prisa por llegar, a que no?
- No, creo q no -de nuevo me sentía intimidado por ese ser q apenas era mas grande que las palmas de mis manos y no se me ocurrió ninguna cosa mas inteligente que decir.
- Esto era un joven aprendiz q solía sentarse en su cama de noche, melancólico, a pensar acerca de su vida y sus problemas. Tenía la clara impresión de q la gente no le hacia caso, ni sus amigos ni su familia parecían depositar su confianza en el ni verle como alguien que vale para muchas cosas y en quien se puede confiar. Un día, no aguantando mas, fue a ver a su maestro. Le contó sus inquietudes que no le dejaban dormir y el maestro lo escuchó atentamente.
Cuando el aprendiz acabó de contar y se sentó a esperar un consejo de su sabio maestro, el hombre le contesto q era un problema muy complicado y que lo pensaría. Seguidamente le preguntó a su aprendiz si le podía hacer un favor de mientras. - Por supuesto -contestó el joven. El maestro le indicó, quitandose su anillo de la mano izquierda, q fuera al pueblo y q lo intentase vender. Finalmente le dijo q no lo vendiera y q volviera a verle para comunicarle las ofertas q le habían hecho.
- No entiendo q tiene q ver una cosa con la otra. Osea se supone q ahora el maestro le tiene q dar alguna especie de consejo maravilloso o algo -no aguante mas sin preguntar y exigir el desenlace deseado por mi lógica.
- Digamos q la historia no va así, se paciente y te sorprenderá.
- Perdona.
La tortuga siguió con la historia...

Monotonía Decadente

Dulces milagros, divinas promesas
Como las q me contabas dormida
Contando una por una las sorpresas
Que yo te he regalado a escondidas

Los arboles escuchan los cantares
Que recitan los poetas del viento
Mientras cuentan y sienten tus verdades
Cuando ríen y lloran de contento

Ahora ya entiendo como te sientes
Me miras con los ojos empapados
Con todos aquellos caprichos pendientes

Ven, llama a la suerte como testigo
Mira y siente lo que ven tus ojos
Olvida la rutina y ven conmigo

Soñamos?

A tu alrededor se forman remolinos de colores. No entiendes nada. No recuerdas como has llegado hasta aquí. Por mucho que intentes averiguarlo no se te ocurre nada y lo atribuyes inocentemente a un sueño. Es sencillo, estas soñando y eso te tranquiliza. A partir de ese momento ya empiezas a verlo todo de otra manera. Los colores ya no te amenazan, los remolinos ya no te marean y empiezas a verlas. Son figuras q aparecen de todas partes. Algunas son personas, otras son animales o seres indefinidos como los q nunca hubieras podido imaginar. A medida que pasan mas cerca tuya empiezas a distinguir sus detalles, sus caras, sus gestos.
Algunos te saludan tímidamente, otros vienen y te dan un abrazo aunq hay quien se limita a mirarte, sonreirte y esperar a que les devuelvas la sonrisa para alejarse contentos. Todo parece como una especie de bienvenida.

Final 1:
Poco a poco los colores van desapareciendo y los van sustituyendo cosas q conoces bien. Un armario, una cama, una habitacion, tu habitación.
Fin del sueño.

Final 2:
No sabes como pero los seres que van llegando ahora, ya no te saludan ni te abrazan, ahora eres como uno mas. Sin haberlo pensado, empiezas a andar hacia delante. Vas caminando sobre un suelo q no distingues y vas viendo mas y mas seres q hacen lo mismo q tu: caminar y caminar hacia el infinito. Alguna que otra vez ocurre un hecho q se va repitiendo periódicamente. De repente un resplandor te ciega. Cuando vuelves a abrir los ojos, ves q acaba de aparecer una persona donde antes no había nada. Le envuelve un aura brillante. Entonces tiene lugar un curiosa reacción por tu parte: inevitable mente ver a esa persona te llena de alegría y sientes unos impulsos irremediables de abrazarla o saludarla.
Después de eso, sigues tu camino.

Final 3:
De entre los colores, el blanco empieza a destacar. Cada vez gana mas terreno. En apenas unos segundos todo es blanco y ya no distingues nada. Te duelen los ojos y los cierras. Inconscientemente sabes q al abrirlos ese mundo blanco va a haber desaparecido. Pero no quieres que eso ocurra. Aguantas un poco mas pero finalmente sucumbes a la curiosidad de saber que ha pasado exactamente.
Te extrañas al volver a ver blanco, pero en esta ocasión es un blanco distinto, no tan cegador ni tan envolvente. Estas mirando una nube desde un banco del parke. Te despejas un poco y te levantas porq has recordado a donde tenias q ir: a ver a una amiga a la que quieres dar una sorpresa. Caminas por calles q conoces bien, llegas a cruces que recuerdas a la perfección pero no todo es como de costumbre. El ambiente es distinto. La gente parece reconocerte por la calle. Algunos te saludan formalmente, otros te dan un abrazo. Hay quien, divertido, te guiña un ojo mientras te saca la lengua. Pero no importa lo que hagan, la alegría te embriaga en una situación tan sorprendente, pero que a la vez no te queda mas remedio que aceptar, porque esta ocurriendo de verdad.

Un Relato entre Millones

No es una historia feliz. Tampoco es una historia triste. Es tan solo una anécdota q ilustra la condición humana.
No me transmite pena, pero si dolor. No me transmite alegría, pero si felicidad.
No me dice nada nuevo, tampoco me aconseja que pruebe lo que no he hecho nunca, tan solo responde al típico: Y si...?
No me gusta ni tampoco me disgusta, pero me hace sentir incomodo, no se exactamente que pensar. No entiendo como algo así puede pasar en la realidad. Una historia de estas características no es muy creíble, pero a la vez te absorbe y te da la sensación de que te está pasando a ti.
No se te ocurre que te pueda pasar a ti, pero al mismo tiempo sabes que no es imposible. Tampoco crees que una cosa así vaya a pasar en tu barrio, en tu pueblo, en tu ciudad, pero el azar es caprichoso y deja caer el boleto ganador donde menos te lo esperas.
Trata de personas, trata de sentimientos, de guerras y de sueños. No hay pasiones firmes, tan solo palabras. Las decisiones serias tampoco abundan, poco hay para elegir en esta historia.
Muchas situaciones te son familiares, te identificas y lo sientes en tus venas. No es de extrañar, es la historia de una vida. Una vida entre varios miles de millones.

Tonos de Lila (2 parte)

Quien dice que las tortugas son lentas? Con extrema rapidez volvió a aparecer en mi vida este curioso personaje. La verdad esq habían pasado unos meses pero en aquella época yo no sabia vivir el momento y todo transcurría muy rápido. Era como un prologo de alguna cosa. Pero, que cosa?
Pasaría tiempo hasta q la respuesta a esa pregunta llegase a mi vida.
De momento podéis imaginaros la escena: Yo acababa de salir de un examen de los de ultima hora, de esos q cuando sales ya no hay ni un almaen todo el instituto. Después de ir a la taquilla y de recojer mis cosas, salí del edificio al q llevaba yendo desde hacia cuatro años.
Allí estaba ella, asomandose desde detrás de la puerta abierta de la entrada. Debí haberlo previsto, no obstante me sobresalté bastante, me agaché y le acaricié la cabeza. Su tacto era suave y agradable.
- Te acompaño a tu casa. Por el camino te tengo que contar una historia -hizo una pausa- Vas a tener que cojerme q no creo q pueda seguir tu ritmo -sonrió.
- Claro -fue lo mas inteligenteque se me ocurrió decir en una situación como esa.

Reflexiones en Lila (1 parte)

Iba por la calle y me encontré una tortuga lila en el suelo. Me agaché y la miré, curioso. No se parecía a ninguna que hubiera visto hasta el momento. Además de su color llamativo y uniforme, destacaba por su tamaño y su belleza.
Fui a tocarla y me habló, lo cual me hizo sobresaltarme.
Ya era bastante inusual encontrar semejante ejemplar de tortuga por la calle, como para tener q estar preparado además para mantener una conversación con dicho espécimen.
- Ven Javi, acercate -dijo la tortuga en un perfecto español- te voy a dar un consejo que espero te sirva para toda la vida de ahora en adelante -.
La tortuga hizo una pausa mientras yo me acercaba todavía mas y me disponía a escucharla.
- Ya sabes que en este mundo te vas a encontrar de todo, mas debes saber q nada es lo q parece. Te vas a encontrar con gente maravillosa q en realidad no lo va a ser, harás amistad con gente incomprensible q no va a dejar de sorprenderte, vas a conocer chicas difíciles q en el fondo se mueren por conocerte, veras con tus propios ojos como las personas cambian en cuestión de meses en los que pueden pasar de timidas introvertidas a sociables extrovertidas, descubrirás como se van tejiendo lazos entre la gente q conoces y te rodea, y vas a, entre otras cosas, tener la posibilidad y el poder de decidir que hacer en cada momento.
La tortuga callo un momento y finalmente se despidió con volteo de cabeza. Se fue alejando poco a poco por una de las calles transversales.
Me incorporé y rápidamente fui hasta el principio de esa calle. No había ni rastro del reptil que hacia unos momentos acababa de brindarme lo q serian los principios de la filosofía que seguiría yo hasta el final de mis días.
Yo en ese momento desconocía eso, y volví a retomar mi rumbo, sonriendo, pues sabia q no seria la ultima vez que vería a la tortuga lila.