Tiempo

El tiempo empezó en un momento desconocido para nosotros. En parte, es normal, pues nosotros lo creamos. El tiempo nos ayuda a planificarnos, a ponernos de acuerdo, a despertarnos, a "ser puntuales", a "no ser puntuales", a estresarnos, a dormirnos y a prepararnos.
Sin el tiempo, no podriamos llegar tarde, y tampoco podriamos estresarnos o sufrir ansiedad.

El tiempo nos hace sus esclavos y, al mismo tiempo, es nuestro esclavo. Esto ocurre porque el tiempo como nosotros lo entendemos, en realidad no existe. Es como las ondas del aire que, captadas por nuestro oido, se convierten en sonidos en nuestra mente. El tiempo es un ente ficticio que hemos creado, en un principio, para nuestro propio benficio. Hemos creado la manera de medir algo inmesurable, algo que no se puede ver, no se puede detener y algo que, a pesar de todo, dirige nuestra vida y la de todo el universo.

No oigo tus pasos
no siento tus besos
no comparto tu mundo
no apruebo tu credo
no busco tus metas
no encuentro tus éxitos
no alago tus logros
no trazo tus lineas
no adoro tu sonrisa
no bebo de tu esencia
no escucho tu melodía
no enciendo tu calor
no borro tus defectos
no escondo tus fracasos
no acepto tu cariño
no entiendo tus deseos
no veo tu aura
no alcanzo tu arcoiris
no duermo contigo
no veo con tus gafas
no cojo tu mano
no abrazo tu ser

pero tu me quieres
pero yo te quiero
el viento se llevará todos esos "No"

Sencillamente

Sencillamente, inundaste mi cuerpo con tus palabras.
Sencillamente, dejaste que me derritiera al sol.
Sencillamente, estoy listo para tu cuerpo.
Sencillamente, hueles a mi.
Sencillamente, adoro tus bizcochos.
Sencillamente, viajo a las estrellas.
Sencillamente, me tumbo a esperarte.
Sencillamente, quemo los recuerdos.
Sencillamente, necesito tus besos.
Sencillamente, no me asusta la luz.
Sencillamente, escribo poemas.
Sencillamente, abrazas lo que una vez fui.
Sencillamente, toco tu piel.
Sencillamente, estoy frente a ti.
Sencillamente, la brisa me da en la cara.
Sencillamente, reviso mis deseos
Sencillamente, abro la ventana al amanecer.
Sencillamente, trato de encontrar mis sueños.
Sencillamente, olvido.
Sencillamente, salto al vacío.

Sabemos quienes somos?

No me lo podía creer! Era sencillamente impresionante! Ver como aquel majestuoso animal planeaba entre las corrientes de aire sin apenas mover sus grandes y robustas alas doradas era realmente un espectáculo digno de contemplar.

- Quién es? -pregunté.

- Es el águila -respondió una gallina- el amo del aire. Surca los cielos con total libertad, pues es su rey.



Alguien encontró una vez un huevo en la montaña. No consiguiendo encontrar ningún nido del que podría haber caido, lo guardó en su bolsillo y prosiguió su paseo.



- Mira! Mira! He encontrado un hormiguero! Ummmm q ricas hormigas, ven, avisa a los demás, q hay para todos!

- Voy enseguida a avisarles, pero deja un poco para nosotros! -fui a avisar a los demás pollos tan rapido como pude. Fui como siempre, dando saltitos y agitando mis alas. Apenas conseguía levantarme unos centímetros del suelo, como los demás pollos, pero esa sensación de no tocar el suelo, sencillamente, me encantaba. Era como si hubiese nacido para ello.



De vuelta a casa, Adela pasó por la granja que había justo al pie de la montaña. En ese momento se acordó del huevo que había encontrado y decidió dejarlo ahí, entre tantos otros huevos parecidos.



- Él pertenece a los cielos, nosotros en cambio, pertenecemos a la tierra, pues somos pollos. -no pude evitar quedarme pensando en lo que había dicho mi compañero, pero después de un rato dejé de pensar en ello y volví a hurgar en la tierra en busca de insectos, pues tenía hambre.



Y el águila, creyendo que era un pollo, vivió y murió como uno de ellos.

.

Me Sugiere...

Qué te sugiere esta imagen?